Pescando barbos a mosca en los ríos guipuzcoanos
Hay momentos de la temporada en los que, por un motivo u otro, dejamos de lado las truchas para pasar una placentera jornada pescando barbos a mosca en nuestros ríos guipuzcoanos.
Barbos a mosca en el río Oria
Es el río “barbero” por excelencia. Un río de generosas dimensiones, con largas tablas, ideales para la pesca con mosca seca y corrientes bajas donde podemos tentar a los barbos con ninfas a pez visto.
Todo el río es libre y sin muerte, excepto en un pequeño tramo en Usurbil que está vedado. Existen zonas con más densidad de peces, dependiendo de la orografía del río y de la comida que en el río puedan encontrar.
Algunos de los puntos calientes para la pesca del barbo son: Lasarte, Andoain o Beasain
Barbos a mosca en el río Araxes
Río de mediano tamaño, con pozos profundos y corrientes de todo tipo, este río posee una buena población de barbos de tamaño medio-grande.
Dispone de fácil acceso, ya que discurre una carretera por toda su orilla.
El río Araxes dispone de un coto para trucha común, un coto para trucha común y arcoíris, que de octubre a marzo se convierte en coto de pesca intensiva y el resto de la temporada un coto normal para trucha.
La zona baja del río, que además en un tramo libre sin muerte, y antes de su confluencia con el río Oria, es la más productiva.
El 31 de julio se cierra la temporada.
Barbos a mosca en el rio río Agaunza
Estas aguas están habitadas tanto por truchas como por barbos, la temporada de pesca queda reducida a los meses comprendidos entre marzo y julio.
El Aguanza es un río pequeño, en el que la pesca a pez visto es la más utilizada, ya sea a ninfa como a seca.
Este río funciona como coto intensivo de octubre a marzo, para, posteriormente, quedarse libre y sin muerte.
El 31 de julio se cierra la temporada.
Mejores épocas para pescar barbos a mosca en los ríos guipuzcoanos
El barbo en nuestros ríos es perezoso cuando las aguas están frías, le cuesta coger las ninfas, debido a que su actividad es muy baja.
p>A partir de mediados de mayo empiezan a comer con mayor ahínco, puesto que en pocas semanas empezará la freza y necesitarán estar fuertes para competir por las mejores corrientes, donde la hembras depositarán sus huevos.
A partir de mediados de junio, y después de la freza, las aguas del río están más calientes y tanto los amaneceres como atardeceres son momento en los cuales los barbos comerán a seca, sin descanso.
Los meses más cálidos como julio y agosto será especialmente importante madrugar o esperar al sereno.
Equipo básico para pescar barbos
Para la pesca del barbo es necesario tener una caña de línea 4,5 o 6, que sea potente y muy resistente.
Un carrete con freno potente y de calidad.
Una línea flotante adecuada para la caña a poder ser de peso adelantado (WF).
Un bajo cónico que acabe en 0,20 de mm y de una longitud de 350 cm (12’).
Y un terminal de fluorocarbono (GrandMax o Ayu) mayor de 0,117 mm.
Moscas para pescar barbos

Pesca a ninfa
Existen en el mercado diferentes ninfas que funcionan bien con los barbos, algunas de ellas son:
- Prince con bola de latón.
Un apunte, por cierto, en este sentido: los perdigones también pescan barbos.
La ninfas no deberán ser pesadas en exceso, ya que los fondos de los ríos suelen estar “alfombrados” de algas.
Pesca a seca
Para mí siempre son favoritas las moscas que imitan hormigas y escarabajos de color negro.
- Shimazaki Ant - TE4
- Ant hi Vis Foam Black - TE18
- Fat Head Beetle-TE5
- Hi Vis Brown Foam Beetle - TE17
saltamontes
Pesca a streamer
No está muy difundida por nuestros ríos, pero hay momentos en los que los barbos de gran tamaño se “tiran” a por los streamers. Normalmente solemos utilizar zonkers de pequeño tamaño, ya que el barbo no tiene una boca especialmente grande.
